Poco después de sufrir la primera versión de Tetris en nuestros Amigas, la desarrolladora americana Spectrum Holobyte se encargaría de crear una nueva versión del juego, y tratar de solucionar el entuerto creado por el engendro de Mirrorsoft.

La verdad es que la nueva versión mejoraría prácticamente todos los aspectos del juego anterior, así pasaríamos de la aburrida y única pantalla de juego del viejo Tetris a tener unos bonitos decorados a 32 colores que van cambiando en cada nivel, lo que además de una mejora visual hacen más amena la partida.

El control también será mucho más eficiente y suave que el anterior juego, aunque esta vez no contamos con la posibilidad de jugar con joystick, lo que es un gran hándicap.

Es cierto que el juego responde bien a nuestras ordenes vía teclado, pero en Amiga el joystick era un periférico casi obligatorio, y el jugador nativo de Amiga no estaba acostumbrado a otra cosa.
Está bien que se ofrezca la posibilidad de esta clase de control para aquellos jugadores que estén habituados o les guste, pero suprimir la posibilidad de control vía joystick, es un error. Pero bueno, paciencia y práctica suavizarán este bache.

A cambio de este disgustillo del control podremos resarcirnos con la inclusión de un modo Torneo, en el que 2 o más jugadores (hasta un máximo de 6) competirán en una partida con las mismas condiciones para todos.

Esto significa que la secuencia de aparición de piezas será la misma para todos, no vale decir aquí eso de que “te han salido mejores a ti”.

Además este modo puede incluir un tiempo límite para mayor presión de juego por arañar puntos, y así obligar al jugador a acelerar la caída de las piezas (con los peligros que esto conlleva).

Otra mejoras como la inclusión de un modo para jugadores avanzados, en el que las piezas bajarán más rápido que en su nivel original, o la customización de varios aspectos del juego (como estadísticas de piezas, pieza siguiente, obstáculos en el pozo…), ayudarán que lleguemos a perdonar (pero no olvidar) el tema sobre el joystick.

El apartado sonoro era lo único aceptable en el atroz juego de Mirrorsoft, pero para no variar, esta versión tiene más calidad. Sencillamente es muy buena, y sobre todo muy rusa.

Violines, balalaikas y treshchotkas se apoderarán de los altavoces de tu monitor deleitándonos con típicas melodías rusas que tan bien acompañan a este juego. Además variarán en cada nivel.

Entonces, tras corregir todos los defectos de la primera versión ¿estaremos frente a una versión definitiva de Tetris? Pues lamentablemente, aunque tiene opciones interesantes, no son suficientes y el juego sigue resultando un Tetris algo básico.
De todos modos aquellos que busquen unas partidas de Tetris puro y duro quedarán complacidos.

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